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La Hoja Federal

Bandera Argentina


A? 3 - N?ero 51

Rep?lica Argentina, 26 de Junio de 2001
?gano de Prensa del
Partido Federal

Av.de Mayo 962 piso 1?
C1083AAR - Buenos Aires


Sumario:
El Euro, una posibilidad de mejorar la competitividad de nuestro pa?
.
El Riesgo Pa? est?en la dirigencia - Dr. Bernardo P. Carlino.
Hasta siempre, Liliana - Reproducci? de la carta del Dip. Mart? Borrelli con motivo del fallecimiento de la Sra. Liliana Segu? Vicepresidente 2? de la Convenci? Metropolitana del Partido Federal.


La Ley de Convertibilidad ampliada que ya contaba con la media sanci? en diputados, finalmente fue aprobada por el Senado de la Naci?.
El Euro, una posibilidad de mejorar la competitividad de nuestro pa?

La Ley de Convertibilidad del peso es una ley fundamental de la Naci?. La misma logr?important?imos resultados para nuestro pa?.  Logr?la erradicaci? de la end?ica inflaci? que hab? azotado a nuestro pa? por d?adas.  De la misma forma, permiti?la organizaci? de un conjunto de iniciativas que permitieron el avance de la productividad y el crecimiento de nuestro pa?, as?como de las exportaciones. Sin embargo, como todas las leyes importantes, la misma se debe adaptar a las cambiantes circunstancias internacionales y corregir problemas que su implementaci? genera.
El enorme desarrollo de la globalizaci? ha hecho que los movimientos de capitales mundiales cobren preeminencia por sobre los flujos comerciales.  As?la respuesta de un conjunto de naciones europeas a la volatilidad que dichos flujos de capitales impon?n al tipo de cambio, fue la introducci? de una moneda com?: el euro.  Esta monedad ha ido cobrando importancia y cobrar?a? m? en los pr?imos a?s.
Q
ue el peso estuviera pegado al d?ar permiti?un muy importante beneficio original porque nuestro pa? logr?reducir dr?ticamente la tasa de inflaci?.  Sin embargo, los fuertes movimientos del d?ar frente a otras monedas implicaron que en ocasiones nuestro peso se depreciara frente a estas terceras monedas, importando de esa forma inflaci? y en otras que se apreciara importando deflaci?.  NuestraOtras Monedas... econom? ha mostrado una importante flexibilidad para absorber parte de estos movimientos.  Sin embargo, la continuada fortaleza del d?ar ha significado que la deflaci? importada desde muchos otros mercados impactara negativamente en el nivel de actividad econ?ica. Por ello, hacia el futuro, es importante que nuestro sistema monetario tenga mecanismos autom?icos que permitan absorber una parte de dichas presiones inflacionarias y deflacionarias. La convertibilidad implica estabilidad de precios y salarios, no deflaci? o inflaci? importada.
La idea central de la propuesta es permitir que el peso se estabilice frente a un conjunto de monedas m? relevantes para la actividad productiva y comercial de nuestro pa?. De la misma forma, disminuir las presiones deflacionarias e inflacionarias que surgen del accionar diario de los mercados financieros mundiales.  Al mismo tiempo debemos evitar cualquier devaluaci? del peso y sobresalto a la poblaci? y recrear un peso en el que la gente pueda efectivamente confiar y adoptar como moneda propia.

La adopci? del euro como ?ico componente adicional de la canasta es tambi? crucial.  El objetivo como dec?mos es estabilizar los precios y salarios en nuestro pa?.  Adoptar la moneda de pa?es con fuerte deflaci? (Jap?) o con inflaci? (Brasil) ser? equivocado.  El objetivo es estabilizar nuestro peso frente a los disturbios en los mercados monetarios mundiales, pero no frente a problemas dom?ticos e inestabilidades nacionales.  As? la potencial inestabilidad de nuestros vecinos regionales y del Jap? hace poco recomendable adoptar cualquier otra moneda como respaldo del peso. ?te debe ser con monedas absolutamente serias, convertibles y con operaciones de pol?ica econ?ica de primer nivel mundial.  Hoy, y en el futuro previsible, s?o el d?ar y el euro tienen esas caracter?tica.
P
or ello, la ratificaci? y perfeccionamiento de la convertibilidad redundar?en una disminuci? de riesgo devaluatorio y por lo tanto de la chance de que nuestra econom? enfrente serias dificultades macroecon?icas.  Eso har? m? cre?le que nuestro pa? es solvente y disminuir?el riesgo pa?.
No s?o es de prever que las tasas de inter? bajen, sino tambi? que los deudores del sistema financiero reciban un alivio. La mayor estabilidad delos precios y los salarios, juntamente con un entorno de mayores inversiones, har?que los trabajadores y empresas tengan mucho menor riesgo de insolvencia.  Esto significa que tendr?  m? cr?ito y, para aquellos hoy endeudados m? capacidad de pago,  Efectivamente, una vez en el nuevo sistema. Las familias enfrentar? un menor riesgo de despido y una mayor estabilidad en sus ingresos que har?mucho m? sencillo pagar  sus deudas, sean ?tas en d?ares o pesos. Este perfeccionamiento de la convertibilidad no es la b?queda de un tipo de cambio m? devaluado.   Es la b?queda de un mejor sistema cambiario que trabaje mejor por la gente.  Es un sistema que disminuir?fuertemente la volatilidad de nuestra econom? eliminando presiones deflacionarias y recesivas.  Todo esto operar?como un importante catalizador de inversiones y de creaci? de empleo.  En definitiva, esto es lo que har?que los argentinos tengamos una mejor moneda.  Que nuestro pa? vuelva a tener peso.

Punto Verde


Algunos dirigentes...El Riesgo Pa? est?en la dirigencia
Por Dr. Bernardo P. Carlino

En una ocurrencia c?ebre, Juan Per? intent?minimizar la importancia del d?ar en nuestra econom? exhortando a preguntar a los argentinos cu?do hab?n visto uno.
A
lgo similar podr? ocurrir respecto al riesgo pa?. Un concepto que hubiera requerido esfuerzo a un docente para su transmisi?, hoy azota con chasquidos dram?icos los titulares de los medios de comunicaci?.
A
s? sabemos que se trata de la sobretasa que debe pagar el deudor nacional, para conseguir cr?ito externo. Lo incierto de la cancelaci? siquiera de los servicios de nuestra deuda soberana, su nivel ahoga la inversi?.
N
uestra dolorosa maceraci? en la "universidad de la vida" nos permite comprender con facilidad que as?no hay crecimiento, sin ello no se generan empleos, y la decadencia que sigue.
C
unde la sensaci? de que el pa? hizo las jugadas m? p?aras de todas sus cartas, fue lujurioso con sus relaciones carnales, apost?el total del patrimonio nacional, y que sin embargo siempre "gana la banca": estamos m? pobres y endeudados que antes, y casi sin cr?ito para seguir jugando. Con el agravante con no existe apuesta a todo o nada, que nos har?recuperar lo perdido.
Q
u?le pasa al riesgo pa?? La pregunta empieza contest?dose con otra : qui?es "son" el riesgo pa? ?
?C?o anduvo el mercado?.... Hmmmm...
Porque lo que se traduce en un n?ero, no se elabora por fusi? o fisi?, aunque a veces por ficci?. La medida diaria la elaboran los responsables de los fondos internacionales, que los represtan o recuperan de los mercados de oferta y demanda del mundo, bajo dos premisas: 1) ning? mercado nuevo est?emergiendo; 2) los dineros internacionales siempre deben estar colocados.
A
unque escisiones internas dividan los territorios nacionales, el mercado mundial es el mismo: s?o puede crecer o decrecer. El ahorro internacional se dirige de un lado a otro mediante un sistema de sem?oros cuyas luces viran al rojo vivo cuanto m? alta es la tasa de riesgo.
A
? con tal "atractivo", no se encuentran muchos dispuestos a prestar: cuando el retorno es alto la probabilidad de cobrar es menor, y ambas cuestiones se retroalimentan obsesivamente En este escenario, es vital para todas las partes tener las cuentas al sin generar esc?dalos que alarmen al m? que sensible mercado mundial, lo que obliga a refinanciar a tasas y condiciones cada vez m? gravosas. Al precio de obturar la inversi? genuina aumentando la aversi? de los acreedores, lo que se traduce en una nueva suba del riesgo pa?.
E
n estas transacciones no intervienen robots sino seres de carne y hueso (enumeraci? suficiente: tienen animaci?, pero no tienen alma), egresados de grado y posgrado especializado, de universidades que tambi? sufren "riesgo acad?ico".
U
na alt?ima proporci? de los fondos internacionales est?concentrada en pocas "bocas de expendio", las menos ap?dices de grandes bancos, manejados por estos ejecutivos condicionados por analistas y calificadores de riesgos. Sus mapas consisten en relaciones macro econ?icas b?icas, parecidas a los que cualquiera de nosotros har? si nos piden ? Qu?golpe !!!plata prestada.
A pesar de todo bebieron un mal trago de Tequila (y muchos de ellos perdieron sus empleos por haber estado aconsejando e invirtiendo en deuda mexicana horas antes) y se emborracharon con los efectos caipirinha (Brasil), vodka (Rusia) y arroz (Tahilandia y dem? tigres, por lo que se informan cada vez m? de cuestiones no econ?icas trascendentes, alarmados ante el inminente efecto narguile (Egipto) o yerba (Argentina).
D
entro de este nuevo equipaje est?la clave de nuestro riesgo pa?.

Las relaciones deuda/PBI, exportaciones/crecimiento industrial, etc?era, dependen de la confiabilidad de las fuentes para ser reducidas a resultados que ayuden a tomar decisiones. A? as?son falibles, pues mientras las calificadoras negaron a Argentina el "BBB" o investment grade, se lo concedieron a Indonesia, que se desintegra en todos los ?denes.
Como consecuencia, nuestra deuda externa como porcentaje del PBI desde 1990, subi?del 28 al 42%, creciendo 60 mil millones de d?ares s?o por el efecto de refinanciar amortizaciones a tasas cada vez m? altas, lo que aumenta el gasto p?lico y empuja la suba de impuestos. A este ritmo, el cese de los pagos internacionales sobrevendr?fatalmente sin posibilidad de apelar a otro megacanje, que por ahora nos ayud?a ganar tiempo.
P
ara revertir este panorama inexorable se requiere de capital humano calificado ("human ware, software y capital ware" son los nuevos activos mundiales) capaz de dise?r y ejecutar las estrategias creativas, audaces y combinadas que requiere la encerrona.
S
upongamos por un momento que se reproduce el antecedente b?lico y el Esp?itu Santo ilumina las mentes de una gran mayor? de nuestros trabajadores, estudiantes, t?nicos y profesionales, elevando milagrosamente sus umbrales de capacidad. Ser? suficiente para que bajara el riesgo pa? ? No.
P
or la sencilla raz? que de no ? y ahora ?... ? Qu?hacemos ???producirse id?tica iluminaci? en la clase dirigente, sus calificaciones actuales aniquilar?n cualquier cambio, malogrando sus resultados. La mayor? de ellos son residuales de una ?oca cuya concepci? mercantil y rent?tica de la pol?ica ya rechazada en el mundo, de la que nuestra sociedad est?hastiada. Los analistas extranjeros tambi?.
M
ientras esto no cambie, el riesgo pa? ser?r?ido a la baja.
A
nte lo improbable de la intercesi? del Esp?itu Santo s?o cabr? el reemplazo biol?ico. No disponemos de tiempo para esa espera. La interrupci? de la democracia, ha provocado un tr?ico vac? en el proceso vital de formaci? y renovaci? de dirigentes.
E
l nuevo ciudadano es indiferente a la pol?ica, hu?fano de formaci? por defecto del sistema de ense?nza y por lo tanto carente de visi? hist?ica. La mayor? conoce a Per? como calle, a Eva por Madonna, y las seniles figuras de los ex dictadores no logran conmoverlos porque el duelo de sus padres los ha privado de referencias dram?icas.
L
a v? m? operativa para intentar cambios en la dirigencia y en el estilo, radica en la Reforma Pol?ica por la v? institucional. Que no es una cuesti? de caja referida al gasto pol?ico -que nadie hasta ahora ha sabido definir con precisi?- sino de modificaci? del conjunto de leyes que han permitido sacralizar una "clase" pol?ica.
E
ste semillero ha sido segregado por la partidocracia, el sistema de listas s?ana, y la falta de oportunidades de formaci?, capacitaci? e investigaci? en el quehacer del dirigente pol?ico.
N
uestro Bloque Federal se est? pronunciando con motivo del inminente tratamiento legislativo, se han enviado cartas a cada afiliado exhort?dolo a sumarse. M? que de la sobretasa del costo del dinero, se trata de la posibilidad de disgregaci? del pa? por falta de dirigentes capaces. Es el aumento del riesgo del no-pa?.
L
o urgente y trascendente de la cuesti? exige el protagonismo inmediato de todos.Dr. Bernardo P. Carlino



Dr. Bernardo P. Carlino
bernardo@carlinopuig.com.ar
Vicepresidente del Partido Federal
Orden Nacional


En un tr?ico accidente falleci?la Sra. Liliana Segu? Vicepresidente 2? de la Convenci? Metropolitana.
Hasta siempre, Liliana

Reproducimos a continuaci? la carta que el Presidente del Partido, Dr. Mart? Borrelli, remitiera a los afiliados y simpatizantes como homenaje a su figura.

“Estimados Amigos/as:

Habitualmente, hacemos llegar a ustedes por este medio la informaci? y las novedades que hacen a la vida institucional y pol?ica del Partido.

Desafortunadamente, en esta ocasi? me dirijo a ustedes para comunicarles con profundo dolor el fallecimiento de la Vicepresidente 2? de la Convenci? Metropolitana, nuestra querida Liliana Segu? esposa de Ricardo Mart?ez, el secretario general del distrito.

Liliana no pudo sobrellevar las heridas mortales que sufriera en un terrible accidente de ruta ocurrido a bordo de un ?nibus a la altura de la ciudad de Paso de los libres, Pcia. de Corrientes y dej?de vivir en la ma?na del mi?coles 20 de junio.

“Lili”, como cari?samente la conocimos todos, era para nosotros mucho mas que “la mujer de Richard”: fue una dirigente leal y capaz, genuina militante siempre dispuesta a brindar su servicio en pos del Partido. Como hija y esposa de pol?icos, hered?la vocaci? c?ica de su padre H?tor, nuestro entra?ble ex vicepresidente de la Junta Metropolitana (97/2000) y acompa? con constancia y sin planteos la militancia de Ricardo, quien en los ?timos tiempos sustra? horas de su hogar para dedicarlas a la tarea partidaria.

Como docente, Liliana confiaba ciegamente en la responsabilidad de las nuevas generaciones y actuaba en consecuencia. Verdadera maestra, aleccionaba a sus peque?s alumnos en las virtudes del sistema republicano y en la necesidad de comprometerse con el destino com?. Doy fe de todo esto por cuanto 45 d?s atr? a instancias suyas, compart?una clase con sus alumnos de 6? y 7? grado contando mis experiencias como flamante diputado de la naci?.

Todas la perdidas humanas son lamentables, en este caso nosotros sentimos haberla perdido verdaderamente mucho. Roguemos a Dios para que la tenga en su reino y para que su familia encuentre consuelo en su misericordia.”



Fe de Erratas:
En el art?ulo ?El Cielo Puede Esperar? del n?ero 50, de los primeros env?s por correo electr?ico del 19 de Junio pasado, cuando aludimos a la empresa KLM, lo correcto es la empresa SAS.
Asimismo, en el art?ulo Que se haga justicia, relativo a la situaci? del ex presidente Menem, donde dice prisi? preventiva, debe decir arresto.

La Hoja Federal

Director
Gustavo P. Forgione

Correo electr?ico: hoja@infored.com.ar  

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