Este documento debe ser maximizado para verse correctamente.                                                  Tambi? puede consultar La Hoja Federal en Internet

Pin Federal

La Hoja Federal
?gano oficial de prensa del Partido Federal

Bandera Argentina


A? 8 - N?ero 82

Rep?lica Argentina, 28 de Diciembre de 2006.

Publicaci? de distribuci? electr?ica
por suscripci?.


Sumario:
El Parto de Telerman - Por Mart? Borrelli

El senador McCarthy resucit?/b> - Por Gustavo P. Forgione

Rep?lica Croma?n - 30 de diciembre de 2004 - Recordatorio

Fe de erratas



9 meses de Gobierno T en la Ciudad de Buenos Aires

El Parto de Telerman

Por Mart? Borrelli

?Esta gesti? de gobierno, lo sabemos, nace sobre las ruinas de Croma?n. Sobre los vicios y las flaquezas de un estado y una sociedad que lo hicieron posible.? Estas eran las primeras palabras que pronunciaba Jorge Telerman al asumir el ejecutivo porte?. A 9 meses de la ca?a de Ibarra su aroma sigue impregnando, sin embargo, toda la gesti? de gobierno de su sucesor.

Al igual que Ibarra, el educado y gentil Jefe de Gobierno ha loteado su gabinete entre las distintas tribus que lo acompa?n y que le sirven -y se sirven de ?- para mantenerse en el poder. As? buena parte del socialismo, rastros del radicalismo, retazos del Ibarrismo y exiliados del pejota, conviven en una gesti? apagada que no acierta en poner segunda velocidad y diferenciarse de la gesti? del frepasista.

Con sus ataques permanentes, el destituido Jefe contribuye a que la gente piense que no son lo mismo con Mister T (algo que ?te deber? agradecer), pero la justificaci? es d?il y artificial.

Este variopinto conglomerado de ministros y subsecretarios, muy similar al que acompa? a Ibarra, carece de unidad de gesti?, visi? estrat?ica y coherencia pol?ica. El parcelamiento del gabinete puede ayudar a sumar fuerzas, pero dif?ilmente contribuya a darle homogeneidad y coherencia a una acci? de gobierno.

La desaparici? de la figura del Jefe de Gabinete de la estructura org?ica ha profundizado esta falencia, ya que justamente es en estos casos de gabinetes ?ensamblados? cuando m? patente se hace su necesidad.

La crisis de Croma?n dio merecidamente por tierra con Raul Fernandez (aunque sigue como Secretario General), pero no deber? haber ocurrido lo mismo con la unidad de Jefatura de Gabinete. Ahora Telerman no tiene nadie que le articule la labor de sus ministros y no parece que ? pueda dedicarse a ello, habida cuenta de que su tiempo transcurre principalmente en actos protocolares, como le espet?el renunciante Nielsen.

Justamente, la renuncia de ?te fue uno de los puntos m? cr?icos de la gesti?, a? mayor que el recambio ministerial que efectu?a tan s?o tres meses de asumir, cuando relev?al Ministro de Salud Spaccavento y al Presidente del Banco Ciudad Hecker, entre otros, porque puso en evidencia la fragilidad del armado T.

Guillermo Nielsen.

De ?presupuesto audaz?, como lo calific?al presentarlo en la Legislatura, a pedirle la renuncia a Nielsen en menos de 30 d?s, Telerman pas?sin soluci? de continuidad de la gloria a la agon?. Porque no s?o pag?por la torpeza de su ex ministro (nunca deber? haber propuesto endeudamiento por $ 660 millones) sino por las ya se?ladas falencias de construcci? pol?ica: todas las tribus juntas no le pueden asegurar un bloque de diputados propio en la Legislatura. Ante el rechazo un?ime al deficitario presupuesto, Telerman tuvo que entregar la cabeza de su ministro estrella a las bancadas opositoras, especialmente a la del PRO, que con sus 22 diputados es la primera minor? y consigui?as?una impensada victoria pol?ica.

Queda en evidencia tambi? la tercera debilidad T en estos nueve meses: las iniciativas oficialistas no encuentran el auspicio y el impulso necesario dentro de la Legislatura para convertirse en leyes. Por caso, la reforma del C?igo de Faltas debi?esperar m? tiempo de lo debido en comisiones por la falta de una espada gubernamental que la apoyara desde adentro. Y cuando fue aprobado, el gobierno tuvo que resignar el castigo a los cartoneros por culpa del kirchnerismo.

Sabido es que la agenda de los parlamentos no es necesariamente la misma que la de los ejecutivos y que el trabajo de los diputados propios es esencial para instalar los temas de gesti?.

Jorge Telerman.Que pas?sino con el tema de la construcci? de torres en la ciudad? Un borrador de Plan Urbano Ambiental descansa en el ejecutivo hace meses. Cuando apenas 50 vecinos apretaron en la puerta del palacio municipal, no hab? soluci? legislativa posible y el decreto de paralizaci? de los permisos fue la apresurada soluci? (que no lo ser?del todo porque en 60 d?s habr?que prorrogar la suspensi? de permisos).

Justo es reconocer que Telerman ha evidenciado mayor vocaci? por el di?ogo que por la pelea, revalorizando la relaci? del ejecutivo con la Legislatura. Un ejemplo de ello es la sanci? de la ley de educaci? sexual, armonizada entre el Ministerio de educaci? porte? y el Macrismo, que preside la Comisi? de Educaci?. Tambi? hay se?les de que algunos de sus ministros se esfuerzan por poner la gesti? en la calle revirtiendo la modorra Ibarrista, pero todav? es temprano para ver esos frutos.

Muchas de las obras concretadas -sobretodo en el ?ea de espacio p?lico- entran en flagrante colisi? con los anuncios marketineros que nunca se van a llevar adelante, mientras las verdaderas necesidades siguen esperando.

Plaza de Mayo, a vuelo de p?aro.

As? la construcci? de una autopista subterr?ea debajo de la 9 de julio gan?titulares de los diarios de la mano de la alianza con Julio de Vido, pero el traspaso de la polic? y de los bomberos a la ciudad sigue aguardando a que el kirchnerista Telerman se ponga de acuerdo con el Presidente Kirchner. La remodelaci? de la Plaza de Mayo, que incluye peatonalizaci? de las cuadras circundantes, (pomposo e in?il proyecto de nuestro Lord Mayor), consume m? esfuerzos que la pol?ica de viviendas para erradicar los asentamientos precarios en la ciudad. Un megaestadio de tenis en una de las zonas m? postergadas de la ciudad se construye en seis meses cuando Lugano y Soldati desesperan hace a?s por la construcci? de un hospital.

Falta de gesti?, debilidad pol?ica, improvisaci?, marketing. En estos nueve meses de Telerman al frente del Ejecutivo, ?los vicios y las flaquezas del estado? no han abandonado todav? a nuestra ciudad de Buenos Aires.

 

Dip. Mart? Borrelli

 

(Art?ulo publicado en la edici? n? 137 de "Edici? i")
 

Dip. Mart? Borrelli
borrelli@federal.org.ar

Presidente del Partido Federal


La Guerra Fr? no termin?en Argentina... para ello

El senador McCarthy resucit?/font>

Y se pas?a la izquierda argentina.

Por Gustavo P. Forgione

La gesti? del presidente Kirchner y "sus Fern?dez" se caracteriz?por revivir los fantasmas del pasado; tanto de los unos, como de los otros.

Vimos como se destruyeron sistem?ica y empedernidamente los logros obtenidos, en la pacificaci? del pa? desde el regreso de la Democracia luego de los a?s de plomo, denominaci? otorgada a la Guerra Fr? en nuestro pa?.

As? toda evoluci? observada en el di?ogo entre las partes se cort?y volvi? a fojas cero; ahora se juzga con par?etros del presente todo lo actuado por quienes, de una forma u otra se desempe?ron en cargos p?licos desde 1970 hasta la fecha, sin interesar el grado de responsabilidad de sus funciones oportunamente y el compromiso demostrado con los distintos gobiernos; salvo los casos en los que el posible imputado se cuadre ante el presidente y los "Fern?dez de Kirchner".Julio Cobos, Mendoza.

Hasta aqu? la metodolog? de sumisi? de los empresarios de todos los rubros, dirigentes sindicales y pol?icos, Arturo Colombi, Corrientes.incluso de lo que podr? encuadrarse en oposici? como el radicalismo; podr? considerarse como "pensamiento ?ico', y todo aqu? que no est?incluido en el grupo elegidoGerardo Zamora, Santiago del Estero. podr?ser excluido de la lista de los empresarios y sindicalistas que reciben la "d?iva populista",  si es pol?ico podr? ser pasible de una considerable demora en los giros de su coparticipaci? o Miguel Saiz, R? Negro.quedar? fuera del tanteo de los fondos p?licos enviados seg? la discreci? del ministro De Vido; con ello, cualquiera en ?bitos municipales o provinciales ser? condenado al ostracismo.

No Eduardo Brizuela Del Moral, Catamarca.satisfecho con las pr?ticas extorsivas a las que la dirigencia pol?ica est? acostumbrada, vemos como, de a poco comienza una nueva modalidad por estas latitudes, s?o comparable con la presi? ejercida por el senador McCarthy desde una comisi? del Senado de los Estados Unidos en la d?ada del 60' cuando la guerra fr? amenazaba con acabar con la vida humana sobre la faz de la Tierra.

 

Resurrecci? de Joseph R. McCarthy

El senador estadounidense que encabez?la caza de brujas realizada en torno de los simpatizantes del comunismo en su pa? fue conocido por varias caracter?ticas que lo acompa?n a? luego de varias d?adas despu? de su existencia.

Ingres? a la pol?ica de la mano del Partido Dem?rata, pero luego se mud?al Partido Republicano... Algo tan rid?ulo como que, en nuestro pa?, un radical se convierta al peronismo o viceversa... o que un peronista se convierta al liberalismo, o viceversa... o que...

Este cambio pudo haberse debido a su afecci? a la ingesta de bebidas alcoh?icas, adicci? que lo llev?al fracaso de su gesti?, su campa? pol?ica y finalmente su muerte a los 48 a?s.

Ser? recordado por mucho tiempo por la paranoia que gener?su obsesi? por censurar a todo aqu? que haya tenido vinculaciones con organizaciones comunistas, por ?fimas que estas fueran.

Su actitud casi patol?ica en el procedimiento de la pesquisa perjudic? en alg? momento, el mismo sentido de la Democracia perseguido por su pa? en contra del totalitarismo de su enemigo sovi?ico.

Tanto es as?que su apellido es sin?imo de indiscriminada caza de brujas.

 

Hoy, decir "Macarthysmo", significa la utilizaci? del "pensamiento ?ico" por parte de los gobiernos hasta una magnitud intolerable.

 

Cabe destacar que, por los a?s en que McCarthy dedic?su vida y carrera a la persecuci? gubernamental de presuntos esp?s sovi?icos, la posguerra mundial impuls?a Estados Unidos y la URSS a mantener la guerra en varios frentes. En el Sudeste Asi?ico el conflicto concluy?en una guerra total; en el resto del mundo, en un combate que se plasm?en alteraciones pol?icas internas de cada pa? en forma de insurgencias aisladas, guerrilla, terrorismo y sedici? por d?adas.

Joseph Raymond McCarthy

Senador Joseph Raymond McCarthy

 

Habr? sido por estos motivos, y por el apoyo recibido de Franklin D. Roosevelt y Harry Truman, que McCarthy pudo insistir en sus investigaciones, aunque ninguna haya prosperado oportunamente. Pero la reciente desclasificaci? de documentos estadounidenses y rusos del Proyecto VENONA, confirm?ahora, que muchos de los estadounidenses perseguidos, realmente pertenecieron a asociaciones comunistas clandestinas y estuvieron vinculados con la, entonces enemiga, Uni? de Rep?licas Socialistas Sovi?icas... O ser?que en Estados Unidos la verdad hist?ica tambi? es din?ica.

Afortunadamente, nuestro pa? no est?en guerra en la actualidad, o por lo menos no lo percibimos, por lo que no debemos preocuparnos acerca del espionaje, salvo en su faz financiera e industrial.

 

McCarthy en Argentina

Horacio VerbitskyLos casos m? claros del Macarthysmo actual son los carpetazos de la SIDE contra Juanjo ?varez y otros, publicados en el diario del presidente; la asonada contra la Asamblea Universitaria de la UBA, que violentamente evit?la asunci? de Atilio Alterini como rector; Rolando Gra?la punible persecuci? desde el programa televisivo "Informe Central" de Rolando Gra? a una se?rita que indic?que "se siente Gorila"...

As? podemos ver y leer innumerable cantidad de descalificaciones, calumnias e injurias sobre dirigentes pol?icos y deportivos, periodistas y empresarios que no piensan como el presidente o los Fern?dez de Kirchner

El t?mino Macarthysmo tom?vida propia desde entonces, y es sin?imo de lo que no se debe hacer...

Si el senador viviera hoy en Argentina, seguramente trabajar? para el gobierno.

 

"BUENAS NOCHES, Y BUENA SUERTE"

Para las generaciones posteriores a la Guerra Fr?, la figura grotesca del senador McCarthy puede pertenecer a la historia antigua, pero est? presente y personificada en muchos periodistas y pol?icos que, cual veleta, siguen al viento en detrimento de la democracia.

Ser? interesante que quienes se suman al pensamiento ?ico glorificado activamente por el grupo de gobierno, se instruyan sobre los fracasos a los que lleva esa limitada actitud intelectual.

Dada esta ?tima cualidad, ser? m? c?odo que estudien algunos pasajes de los discursos del senador Joseph R. McCarthy en la Comisi? del Senado y las discusiones con el periodista Edward R. Murrow de la CBS en la pel?ula de George Clooney "Good night, and good luck" estrenada el a? pasado.

Resulta curioso asociar al Macarthysmo con un gobierno que se dice de izquierda, pero la actitud exagerada es la misma, lo que cambia es la v?tima y el contexto hist?ico.Gustavo P. Forgione - Director de La Hoja Federal


 

Gustavo P. Forgione
gustavo@forgione.com.ar
Vicepresidente II - Partido Federal
Capital Federal


V?timas de Rep?lica Croma?n.Rep?lica Croma?n - 30 de diciembre de 2004

A dos a?s de la tragedia que enlut?a la sociedad; nuestro recuerdo para las v?timas y el compromiso de seguir trabajando para que hechos as?no puedan volver a ocurrir.

Partido Federal


FE DE ERRATAS

En el art?ulo "Un cambio significativo, El factor religioso en la pol?ica argentina", publicado en la edici? n?ero 81 de La Hoja Federal, del 14 de diciembre de 2006, enviada por correo electr?ico, omitimos mencionar la autor? del Dr. Ra? Scialabba, presidente de CALIR.


Agradecemos, por este medio, los saludos que nos han hecho llegar y las respuestas a nuestra esquela con motivo de las fiestas. Asimismo, hacemos extensivos nuestros deseos de felicidad y prosperidad para el nuevo a? que comienza a aquellos que, por cuestiones inform?icas ajenas a La Hoja Federal, no lo recibieron.


Vea el ?timo n?ero
desde aqu?/FONT>

 

 

La Hoja Federal

Director
Gustavo P. Forgione

Correo electr?ico: hoja@infored.com.ar  

Tel?onos:
Lectores y Redacci?:
(011) 4338-3071
Director:
(011) 15 + 5109-8824

?gano oficial de prensa del Partido Federal

 

 

Suscriba a un amigo a La Hoja Federal mediante este formulario
Nombre
Direcci? de correo electr?ico

Presione una sola vez y su informaci? ser?enviada a nuestra direcci?.
    
Si tuviera problemas con el formulario, env?nos un mensaje a
hoja@infored.com.ar.

Consulte otros n?eros de La Hoja Federal
desde nuestro ?dice general


P?inas recomendadas:

Falklands-Malvinas Forum Index
Foro Falklands-Malvinas
 

Partido Federal   -   Dip.Mart? Borrelli   -   Baires 2004
Diarios:
La Naci? - La Raz? - Tiempo Fueguino (TDF) - El Sure? (TDF) - Provincia 23 (TDF) - El Diario (TDF)- La Nueva Provincia (BHI) - Penguin News (Malvinas) - La Gaceta (Tucum?)
Informaci?: Informaci? Legislativa del Ministerio de Econom? - ArgenLex