El Ministro Carlos Tomada
prometi?que "los funcionarios del ?ea se tomar? todo el tiempo
necesario para decidir el futuro del sistema previsional", estudio que se
estima concluir?en Marzo pr?imo.
Evidentemente la campa?
medi?ica que tuvimos que soportar hace aproximadamente un mes tendiente
a crear p?ico entre los aportantes al Sistema Integrado de Jubilaciones
y Pensiones lleg?a su fin; por lo menos, con el apoyo de los medios
masivos.
Llegamos a escuchar que
los
fondos depositados en el entonces "execrable" sistema privado de
jubilaciones iban a reducirse en un 75 por ciento, resultando ello de una
"ingenua cuenta" que transportaba directamente el quebranto de bonos del
Estado aplicado a los haberes netos de los Fondos de Jubilaciones y
Pensiones.
Como la mentira tiene patas
cortas y los n?eros en blanco y negro hablan por s?solos, esto fue
repetido hasta el hartazgo por algunos "periquitos" detr? de
los micr?onos s?o por dos semanas; pero, al momento de hacer cuentas y
antes de que alg? iluminado haga quedar mal p?licamente a quienes
contribuyeron a tal desinformaci?, todo comentario sobre la cuesti?
fue suspendido hasta nuevo aviso. Afortunadamente, desde hace algunas
semanas, el silencio sobre el futuro del sistema de capitalizaci? es muy
resonante.
Blanco y negro
Resulta que la totalidad de
los haberes del sistema de capitalizaci? no est?invertida en los
"bonos del quebranto" del Estado Nacional. En n?eros
aproximados, de los 44.000 millones en administraci?, 32.000 millones
corresponden a t?ulos p?licos, de los cuales 27.900 millones s?
corresponden a bonos impagos. Bajo la l?ica m? b?ica advertiremos
que no corre la reducci? del 75 por ciento publicada y las noticias que
persistieron durante un par de semanas fueron s?o un reiterado error.
A
esta "humilde cuenta",
habr?que restarle el resultado de la negociaci? entre los funcionarios
del gobierno y quienes administran los Fondos de Jubilaciones y Pensiones,
quedando para la justicia la resoluci? de las causas que a ella se hayan
girado por el incumplimiento de las obligaciones del Estado Nacional.
Luego de cuentas y m?
cuentas advertiremos que los Fondos de Jubilaciones y Pensiones no habr?
sufrido una merma considerable, ya que s?o habr? perdido un cociente
de los bonos adquiridos como ahorro y que oportunamente configuraron un
compromiso de f?con el cumplimiento del Estado Argentino, el que con sus
gestiones actuales est?intentando deshonrar.
Mientras dur?la campa?,
el p?ico hizo zozobrar la confianza de quienes se iban a jubilar de
inmediato, ya que escucharon las alarmas de la prensa se?lando un seguro
desastre; pero resulta que, en la ecuaci? de valuaci? del Fondo de
Jubilaciones y Pensiones
para casos individuales, la incidencia del incumplimiento de pagos del
Estado ya hab? sido descontada por el mercado. Los bonos que
amenazadoramente sufrir?n un descuento del 75% por ciento, seg? la
publicidad, ya estaban
cotizando al 25% de su valor, por lo que tales alarmas no fueron m? que
una demostraci? de ignorancia de quienes las hicieron sonar tarde... dos a?s
despu? de que el Gobierno vociferara el "no pago" de la deuda
p?lica ante la Asamblea.
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A la caza de incautos
Oportunamente, el presidente
Kirchner arremeti?contra las Administradoras de Fondos, culp?dolas de
haber administrado mal el dinero que le hab?n confiado sus aportantes, luego
indic?que ordenar? auditor?s complejas sobre las operatorias para
descubrir alg? "agujero negro"; ello nos hizo pensar que esto se
deb? a una operaci? medi?ica tendiente a justificar el paso siguiente,
que ser? la aniquilaci? del sistema de capitalizaci?; pero
tales amenazas fueron suspendidas sospechosa y coincidentemente cuando termin?de
tratarse el tema en los medios.
Probablemente a mediados del
verano pr?imo, previendo la antelaci? necesaria a la presentaci? del tan
prometido proyecto de reforma del sistema previsional en el mes de Marzo,
volveremos a escuchar del Gobierno y a leer en la prensa, entre otras
verdades, que las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones se
quedan con parte de los aportes de sus administrados, y eso es cierto; ser?
la obligaci? del Gobierno Federal defender esos fondos y encontrar la
soluci? para que las AFJP bajen sus comisiones a niveles razonables, ya que
en la actualidad son extremadamente altas.
Si el proyecto del gobierno es
permitir la libre movilidad entre ambos sistemas y la campa? es seducir a quienes
hoy permanecen en el sistema de capitalizaci? para que comiencen a aportar
al sistema estatal de reparto, el resultado ser?inocuo para el sistema
previsional pero devastador para quien haga el traspaso en forma individual,
ya que s?o retendr?como seguro, los aportes al sistema de capitalizaci?;
y su siguiente porci? de aportes al sistema de reparto, que s?o le alcanzar?
para una prestaci? estatal paup?rima.
Por otro lado, si el a? no presentado
proyecto llega a tender a apoderarse de los ahorros existentes en los
fondos de capitalizaci? para que sean administrados por el Estado, ser?
nuestra obligaci? su defensa a pluma, capa y espada; de otro modo, la
totalidad de los futuros jubilados recibir?mos s?o una paup?rima
Prestaci? B?ica Universal y nuestros ahorros individuales ser?n
diezmados en gastos de administraci? y pol?ica.
Parad?icamente, en
declaraciones en un almuerzo organizado por la Asociaci? Cristiana de
Dirigentes de Empresa, el ministro Tomada advirti?que se estudiar?un
sistema mixto para todos los trabajadores, as? una parte de los dineros en
el sistema privado podr?n sumarse a los del sistema de reparto.
Ocurre que, en la actualidad,
el sistema de capitalizaci? ya es mixto, puesto que una porci? de los
aportes se destina al Fondo de Jubilaciones y Pensiones para que las AFJP
administren su inversi? en acciones de sociedades comerciales, nuevos
emprendimientos productivos y, por qu?no, en bonos del estado; la otra
porci? va al sistema de reparto, conformando luego la Prestaci? B?ica
Universal, responsabilidad del mismo estado que hoy no puede cumplir con los
bonos depositados en las cuentas de los futuros jubilados.
Las expresiones del ministro en la
actualidad no acompa?n las ideas expresadas por el presidente de la Naci?
hace un mes, por lo que se intuye que a? no existe un proyecto definido,
y que si existi? fue silenciado en honor a la raz?.
Habr?que esperar que el
gobierno diga de una vez por todas lo que pretende hacer con el
"reiteradamente prometido proyecto de reforma del sistema
previsional", con las alarmas listas.
Gustavo
P. Forgione
gustavo@forgione.com.ar
Director
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