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La Hoja Federal |
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| Los errores del Presidente ponen al
pa? en estado de zozobra CHACHO, UNA RENUNCIA ESPERADA |
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Finalmente, el vicepresidente de la
Naci?, Carlos Alvarez, renunci?a su cargo luego de la
impresentable recomposici? de gabinete que
el d? anterior hab? realizado el presidente De la
Rua. No pod? ser otro el final de esta historia
cuando los argentinos supimos que el cuestionado
Ministro Flamarique dejaba la cartera de Trabajo para
ocupar la estrat?ica Secretar? General de la
Presidencia de la Naci?, como si nada hubiera pasado en
el pa? en los ?timos tres meses. ? Pod? Alvarez
acaso, tolerar semejante desaire del  Presidente al mantener en su
c?culo a una de las figuras m? comprometidas con el
esc?dalo de los sobornos en el Senado de la Naci? y
de quien hab? pedido la renuncia pocos d?s atr? ?Est?claro que el papel desempe?do por Alvarez durante esta crisis le hab? impuesto l?ites muy estrechos de maniobra, dentro de los cuales no cab? la convivencia por mucho tiempo m? con figuras como el senador Genoud, el Secretario de Santiba?z y el ex Ministro Flamarique. ? Pod? desconocer el presidente De la Rua esta realidad ?... ? Imposible !. Muy a su pesar, los  reclamos
del Vicepresidente eran los reclamos de gran parte de la
ciudadan? que esperaba un golpe de tim? concreto en
las pol?icas de gobierno y en las figuras que
llevar?n adelante esas pol?icas. |
 Por eso, esta renuncia de
Alvarez, no puede sorprender al Presidente,
porque la desilusi? y perplejidad que sinti?gran
parte de nuestro pueblo frente a los cambios en el
gabinete conocidos ayer, es la misma que seguramente
sinti?el vicepresidente y muchos otros dirigentes
pol?icos que como nosotros desde el Partido
Federal,
venimos reclamando cambios de 180 grados en la gesti?
de gobierno, y en el tratamiento del esc?dalo de los
sobornos en el Senado.? Si el Presidente sab? todo esto, por qu? entonces embisti?con semejante torpeza contra Chacho?. O es que acaso, tenemos que hablar de una maniobra premeditada para sac?selo de encima?. Extra? que trat?dose de de la Rua, pol?ico con m? de 30 a?s de trayectoria, no haya medido en su exacta dimensi? los alcances y efectos de las medidas que tom?el ?timo jueves. Por eso, porque la ingenuidad est?reservada s?o a los ni?s, cuesta creer en el argumento de la torpeza y crece la sospecha de que todo esto forma parte de las intrigas pol?icas tejidas entre de la Rua y el Menemismo. "Esta pol?ica est?en estado terminal", dijo Chacho en su discurso de renuncia en el Hotel Castelar. Hace rato que los argentinos hemos tomado nota de esta realidad. ? Querr? de la Rua liderar el cambio que los argentinos reclaman ?. Hasta ahora, m? all?de todos los discursos y las promesas de campa?, han hecho todo lo contrario. La renuncia de Chacho la redact?De la Rua. |
Sin Chacho en el
gobierno y con fisuras en el Congreso, el FrePaSo ya no
es buen socio |
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Otra posibilidad
ser? apostar a acordar una agenda legislativa con los
diputados de los partidos provinciales, pero su escaso
peso pol?ico (generalmente compartido con
administraciones justicialistas) y sus c?licos cambios
de intereses, hacen demasiado vol?il, y por ende,
insegura cualquier negociaci?. Y Cavallo ? El
espacio que lidera Acci? por la Rep?lica es
naturalmente refractario a cualquier entendimiento con el
radicalismo y ?te a su vez, no digiere la figura del ex
ministro. * El Dr. Mart? Borrelli es presidente del Partido Federal |
| E N C U E S T A |
Consulta
Federal sobre la renuncia del Vicepresidente, Lic. Carlos
"Chacho"?varez. |
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De la Rua forz?
la m?uina m? de lo aconsejable: llev?hasta
el extremo la tirantez con su socio pol?ico y ahora la
coalici? gobernante pende de un hilo. Con una mayor?
peronista abroquelada en el Senado y un bloque de
diputados agrietado por diferencias sobre la pol?ica
econ?ica del gobierno (Carri? Bravo, Castro, Rivas,
Polino, etc.) y ahora herido por la renuncia de l?er
del FrePaSo, al gobierno no le quedan muchas opciones
para enderezar su rumbo pol?ico.
En m? de una
oportunidad Alfons? ha dicho que la Alianza naci?para
luchar contra la nueva derecha, en donde ubica
c?odamente a Cavallo. M? all?que de la Rua haya
pensado en ? para desempe?r alguna funci? de
gobierno, ser? impensable que necesitado como est?de
su propio partido para disimular la retirada de Alvarez,
tome alguna decisi? que lo enfrente con su propio
aparato.